Dra. Carola Pérez participa en Seminario : «Asimetría en el desarrollo cerebral en adolescentes y sus desafíos para el funcionamiento familiar»
La Dra. Carola Pérez en conjunto con el Dr. Francisco Ceric presentan el tema de Asimetría en el desarrollo cerebral en adolescentes y sus desafíos para el funcionamiento familiar.
Se señala que la adolescencia es la etapa más crítica del ciclo vital, pues ocurren diversos cambios en el individuo, tanto a nivel biológico como conductual. Estos cambios se deben principalmente al desarrollo del cerebro.
Durante la adolescencia, el cerebro humano sufre una restructuración: un aumento de materia gris, lo cual produce el recorte de ciertas conexiones neuronales, para empezar a robustecer las que más se usan y más beneficio generan. La materia gris se desarrolla rápidamente durante la infancia, y más lentamente durante la adolescencia. El volumen de materia gris alcanza su máximo a los 11 años en las niñas y a los 13 años en los niños, luego este volumen empieza a disminuir.
Los padres suelen sufrir temores y preocupaciones cuando sus hijos alcanzan la adolescencia, ya que se vuelve más difícil el control y la supervisión sobre ellos. En esta etapa, los sujetos van desarrollando mayor autonomía en distintos ámbitos de su vida, como lo son las relaciones sociales. Así, en la adolescencia es común que se amplíe el círculo social o que comiencen a tener en parejas románticas.
Es normal que los padres se preocupen por sus hijos adolescentes, ya que estos son más propensos a tomar riesgos o desarrollar conductas problemáticas. Los adolescentes se encuentran en una constante búsqueda de experimentación, tendiendo a maximizar los beneficios y minimizar el riesgo de distintas actividades, como, por ejemplo, el consumo de drogas y alcohol. Actualmente un alto porcentaje de niños y niñas muestran un alto consumo de alcohol y drogas desde los 12 años. Todas estas adicciones generan consecuencias neurológicas a mediano y largo plazo.
Aun así, la adolescencia es una oportunidad de desarrollo en sí misma. En esta etapa, se desarrollan las capacidades de toma de decisiones, que promueven a su vez el sentido de agencia y ayudan a conformar la identidad. Si los padres no permiten que los adolescentes experimenten y tomen decisiones, estarán minando su sentido de agencia y oportunidades valiosas para su desarrollo.
Los adultos a cargo de adolescentes se encuentran con un desafío importante: encontrar un equilibrio entre brindar a sus hijos oportunidades para el desarrollo de su autonomía, y a su vez protegerlos de potenciales riesgos para su integridad. Los psicólogos sugieren permitir otorgar espacios para el desarrollo de la capacidad de autorregulación y autonomía, entregando herramientas que ayuden a formar y establecer su identidad.
El desafío para los padres es generar un ambiente cálido de comunicación, confianza y apoyo constante hacia sus hijos, pues, mientras más cercana sea la relación, es más probable que los adolescentes tomen en cuenta las opiniones y sugerencias de sus representantes. Es importante para los padres conocer y entender las necesidades, gustos y actitudes de sus hijos adolescentes.